La festividad y su raíz bíblica.
Jag HaShabuot significa literalmente “Fiesta de las semanas”
Es la segunda de las tres festividades de Peregrinaje que los judíos celebran anualmente, se celebra el día 6 de Sivan en Eretz Israel y fuera de Israel el 6 y 7 de Siván. El nombre de la festividad se basa en el mandato bíblico de contar siete semanas desde la segunda noche de Pesaj y se celebra el día 50 como un día santo.
Levítico 23:15-16 “Y contaréis para ustedes desde el día siguiente día del Shabat (Yom Tov)desde el día en que traen el ómer el meneado, siete semanas completas serán. Hasta el otro día de la semana, la séptima contaréis cincuenta días y acercaréis ofrenda nueva para Di-s”
Deuteronomio 16:10 “Siete semanas bíblicas para ti, desde el comienzo de la hoz en la siega, comenzarás a contar siete semanas. Y harás la fiesta de las semanas, para Di-s, tu Di-s con la generosidad del donativo de tu mano que darás, conforme te bendiciera Di-s,tu Di-s(Tdp)”
Conexión de Shabuot.
«Shabuot» significa «promesas»: Cuando Hashem dio la Torá al pueblo judío, ellos prometieron obedecerla y permanecer fieles a Él. A cambío Hashem prometió que amará a los judíos y no los cambiaría por ningún otro pueblo.
El día de Shabuot recibimos nuevamente la Torá y se nos da la oportunidad de reconectar con nuestro compromiso con el cumplimento de la Torá.
Al final de la vida de Moshé, poco antes de que los Bnei Israel entraran a
Éretz Israel, él habló de las mitzvot de Hashem, «que yo te ordeno hoy», refiriéndose a la Torá que había sido entregada cuarenta años antes. Esto quiere decir que aunque la Torá había sido entregada antes seguía siendo una ordenanza para el presente.
Asi aprendemos que la entrega de la Torá no se revela únicamente una vez al año, debería ser celebrada todos los días ya que cada mañana decimos: «Baruj Atá Hashem, notén haTorá”, «Bendito eres Tú, Hashem, Quien da la Torá», en el tiempo presente. Cada mañana es una nueva oportunidad de aceptar la Torá sobre nosotros mismos con una energía, pasión y determinación renovadas.
Del mismo modo en que debemos ingerir alimentos todos los días a pesar de haber comido el día anterior, nuestro compromiso con la Torá debe reafirmarse cada día. Debería sentirse como una oportunidad totalmente nueva, tan emocionante como la primera vez que Hashem se acercó a los Bnei Israel con el ofrecimiento de la Torá. Cada día debería llevar consigo el entusiasmo de algo nuevo, con toda la alegría y pasión que aquello trae.
Celebrar Shavuot no es una conmemoración de un evento del pasado. Es una reafirmación de aceptar la Torá de nuevo, abrazándola y apreciándola como si fuera la primera vez, tal como en el día de la Entrega de la Torá.
Costumbres:
La noche de shabuot.
Los judios piadosos, tienen la costumbre de asistir a círculos especiales de estudio en la noche de Shavuot, desde antes de la medianoche hasta el alba, leyendo una antología sagrada conocida como Tikún Leil Shavuot.
En esta noche participamos en las lecturas y discusiones especiales para la corrección de esta noche .
No olvidemos lo que jajamim nos dicen:” Quien no duerme en la noche de shabuot no le ocurrirá ningún mal durante todo el año”
Esta preparación espiritual sin dormir puede compararse con los tres días de limitación “sheloshet veméi hagbala” impuesto a los Israelitas antes de la entrega de la Torá en el Sinaí en Éxodo 19:12.
Existen dos costumbres en shabuot: adornar con flores y consumir lácteos durante la festividad.
Adornar con flores.
Expondremos dos razones:
1.En todos los siglos del exilio, la sinagoga era decorada en Shavuot con todo tipo de plantas (especialmente la bimá y el arca sagrada) para destacar el carácter festivo en la cosecha de la antigüedad y esta práctica continúa hoy en día.
2.Cuando la Torá fue entregada en el desierto, este comenzó a florecer esto debe recordarnos que si hubo tal efecto en el mundo material debemos apreciar cuan grande es el impacto espiritual que tiene la Torá al llegar a nuestra vida, hace florecer nuestra alma y nuestra vida siempre y cuando estemos predispuestos a recibirla.
Comer lácteos.
¿Dónde hay un indicio en la Torá de comer lácteos en Shabuot?
En la porción de la Torá que enumera la ofrenda Musaf de Shavuot
Bamidbar 28:26 comienza con las palabras «En el día de las primicias al sacrificar una oblación para Hashem en vuestras semanas” en hebreo “minjá jadashá leHashem beshavuoteijem”’ Las primeras letras de las palabras «jadashá leHashem beshavuoteijem»
חלב forman la palabra «jalab» -“leche”, de aquí aprendemos la costumbre de comer lácteos.
Otro segundo indicio está en Shemot 23:19, dice lo siguiente «las primicias traerás a la Casa de Di-s tu Di-s; no cocinarás al cabrito en la leche de su madre».
¿Por qué están estos dos temas aparentemente diferentes yuxtapuestos en el mismo versículo?
Shabuot es conocido como Bikurim (primeros frutos), uno de los motivos es que era el momento elegido para traerlos al Bet Hamikdash.
Puesto que es costumbre comer lácteos en Shabuot debemos ser muy cuidadosos mientras cocinamos para lom Tov de no mezclar carne y leche por la ocupaciones del dia, es por eso que el versículo nos hace una alusión a recordar que el día de la festividad al preparar la carne y los lácteos para el dia, debemos tener presente no mezclar estos elementos.
Otro motivo lo aprendemos de la comparación de la leche con la Torá y la Tierra de Israel en Cantar de los Cantares (4:11) Hashem dice al pueblo judío «La dulzura (de la Torá) gotea de sus labios; como miel y leche está bajo su lengua». Puesto que la Torá es comparada a la leche, consumimos una comida láctea en Shavuot, cuando fue dada la Torá.